Hace unos meses, tomando un café
en el bar de la librería Laie con el apasionado editor Josep Forment (Alrevés
Editorial), me enseñó un volumen de relatos policiales en catalán que se
titulaba: Crims.cat, del que ya les
hablaré en otro momento. Pues bien, ese libro fue la chispa que incendió “la cua de palla”* que alumbra esta nueva
colección de novela criminal en lengua catalana que ahora les presento. Claro
que también algo tuvo que ver la insistencia de Álex Martín, profesor en la
Universidad de Salamanca y coautor, junto con Jordi Canal, del estupendo ensayo
La Cua de Palla: retrat en groc i negre, que ya les comenté en estas mismas
paginas.
Difícil tarea el seguir los pasos
de la mítica colección de las portadas amarillas (“follow the yellow brick road”), pero entusiasmo y buen hacer no
les falta a este equipo editorial. De momento hay unas premisas que la
colección Crims.cat cumple para ser una colección seria, a saber: Tiene un
diseño identificativo, en este caso a cargo de Mauro Bianco, con unas
estupendas portadas con fotos en blanco y negro; una numeración que agradecemos
los lectores; un director de colección, el citado Álex Martín y el compromiso
–esperemos que se cumpla- de hacer una
coherente selección de autores y de títulos inéditos. Los dos primeros títulos
que inauguran la colección apuntan por ese camino, ya que nos ofrecen un
trabajo inédito, primerizo y casi experimental del prolijo y consolidado autor Andreu
Martín, Història de mort (pendiente
de leer, llegado el caso ya la comentaré) y Torn
de nit, de Agustí Vehí. Ésta recién la comencé y permítanme una digresión:
No me gusta la novela negra que es una mera crónica de sucesos, para eso ya
hay unos pocos, pero muy pocos,
periodistas que lo hacen muy bien, tampoco me gusta la moda del ensalzamiento y
apología de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, y menos la novela
que yo llamo corporativista, ya saben, perro no come perro…, pues bien, con
todos estos temores comencé a leer la novela de Vehí, porque Vehí es un madero,
un poli muy particular, eso sí, para empezar es Doctor en Historia por la
Universidad Autónoma de Barcelona, ha escrito divulgación histórica y, hasta el
momento y contando la presente, cuatro novelas policíacas, algunas de ellas
premiadas, aunque ya saben que, con los tiempos que corren en el mundo
editorial, eso no es garantía de nada. Pero, como les decía, además de su
faceta intelectual y docente, Vehí es subinspector de la Guardia Urbana de
Figueres. Como les dije, apenas llevo unas 30 páginas y ya he soltado más de
una carcajada con este particular turno de noche de la policía del pueblo de
Vilaclara, porque, como se dice en la contraportada, nos encontramos con un
“vodevil negro-policial a la ampurdanesa”. Ya veremos que nos depara, aunque
estos ampurdaneses tienen un punto de locura lúcida y surrealista que me
fascina y que me lleva a pensar, salvando las distancias, en otros personajes
de esta comarca que convirtieron a Lidia Nogués i Sabà (hija de la última “bruja”
de Cadaqués, conocida como “La Sabana”), en la musa del método paranoico
crítico, me refiero a Salvador Dalí en este caso, pero también al farmacéutico
que ejerció de profesor de instituto en Figueres, Alexandre Deulofeu, curioso
personaje que elucubró sobre la Teoría de las Catástrofes y escribió el libro La Matemática de la Historia (¡en 17
volúmenes!), o Narcis Monturiol, hijo
también de esta ciudad y pionero de la navegación submarina y eterno soñador de
icarias.
Volviendo a la información sobre
la colección, me cuentan que piensan sacar seis títulos por año, con autores
catalanes y europeos poco o nada conocidos por estas tierras. Los próximos
lanzamientos serán Crònica dels bons
trinxeraires, del periodista deportivo y escritor portugués Mário Zambujal,
y Pluja negra, del escritor italiano
Flavio Soriga. La colección pretende englobar subgéneros como el policial, el
detectivesco, o la novela de enigmas o espías. Por cierto, al margen de esta
colección, Alrevés Ediciones también ha publicado y publicará novela negra en
lengua castellana, alguna comentaré aquí.
Para presentar en sociedad esta
colección, los editores tuvieron la buena idea de dar una pequeña fiesta donde,
las letras negras y las cañas de cerveza, todo hay que decirlo, fueron las
protagonistas. Esto aconteció el pasado día 8 de marzo en una antigua fábrica
de cerveza, la Moritz, que data de 1856, pero hoy reconvertida en un
impresionante e inmenso bar de arquitectura y diseño muy interesante. La verdad es que éste plumilla agradeció la oportunidad de dejar el cubil y coincidir con
“sospechosos habituales” como Montse Clavé y Paco Camarasa, los libreros de
“Negra y Criminal”, los novelistas Raúl Argemí, Teresa Solano…, los
protagonistas Andreu Martín y Agustí Vehí, y periodistas, blogueros y demás
aficionados que, a pesar de la creencia del maestro de ceremonias, el actor y
periodista de TV3 Roger de Gràcia, no somos seres torturados y taciturnos que
andamos pensando todo el día en el crimen perfecto, bueno, algunos sí. Por lo
demás, Roger estuvo muy bien, y bien asesorado por el director de la colección,
Álex Martín.
Andreu Martín, en su larga
carrera literaria, ha matado mucho y bien, pero eso no quita para que sea un
tipo la mar de simpático y cercano. En el evento dijo una cosa con la que estoy
de acuerdo –bueno, dijo más de una-, y tiene su gracia. Miren, como es lógico,
la angustia y el miedo es subjetivo, y Andreu contó que cuando leía en una
novela nórdica, de esas que ahora están de moda, algo como esto: “como eran las
5 de la tarde, todos los bares estaban cerrados”… ¡Eso sí qué le producía angustia! Y a mí, Andreu, y a mí. Agustí Vehí, además de explicarnos que sus convecinos y él no se
explican como hay gente que no hemos nacido en Figueres, nos dijo que cada
sociedad mata como vive, y puestos a escoger, es preferible matar o morir,
literariamente hablando, con la luz de casa
nostra (“casa”, que no “cosa”), que
es una bonita manera de hablar de la luz del Mediterráneo. La traductora y
novelista, Teresa Solano (Un crimen
imperfecto), nos puso en la pista de la verdadera inspiración para el autor
de género negro: ¡Todo está en William Shakespeare!, sabias palabras, si señor,
lean a Shakespeare y disfruten de la “negrura” de, por ejemplo, “La obra
escocesa”, que no nombraré por el mal fario que dicen que trae cuando de escenarios
se habla, y qué es esto sino la salida a escena de una nueva colección… Y
claro, lean a los autores de Crims.cat, porque esto promete.
* Tu vas fugent, no ausas fer batalla: por has de foch, la coa tens de
palla
Estoy estudiando catalán y esta colección serán mis libros de texto, ¿se puede pedir más?. Me encanta, señor Coria, como explica las cosas, como escribe y la sustancia de sus textos. Ya ve, aquí me tiene buscando información sobre la musa que cita...
ResponderEliminarGracias. Las asociaciones paranoicas de "Lidia de Cadaqués" merecen un estudio. Aquí le dejo dos de sus misteriosas frases, la primera sí tiene explicación para mí, ya que alude a un suceso concreto, cuando sus hijos se pelearon con su amor platónico, Eugeni D'ors, y ella tomó partido por éste último. La otra frase es hermosa, sin más:
ResponderEliminar"La miel es más dulce que la sangre"
"El queso de leche de cerezas"
“como eran las 5 de la tarde, todos los bares estaban cerrados”… No he leído nada tan terrorrífico desde que Ruíz Zafón anunció su nueva novela. Interesante crónica.
ResponderEliminar¿Agustí Vehí es hijo de Joan Vehí? Joan, aunque era carpintero de profesión, fue el fotógrafo de Dalí, éste le llamaba el "Divino calvo".
ResponderEliminarPues no lo sé, amigo. Sí así fuera, sería curioso que yo cite a Dalí en esta nota al hablar de Agustí, sin conocer esa posible relación. Llevo una semana con "casualidades" parecidas.
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