Uno de los inculpados principales en este caso fue Josep María Bassols Iglesias, abogado y miembro de una de las más ilustres familias de políticos e industriales de Cataluña. Bassols dejó a su esposa e hijos y se fue a vivir con Margarita Ruiz de Lihori, Marquesa de Villasante, Baronesa de Alcahalí, Duquesa de Valdeáguilas y Vizcondesa de la Mosquera. Según me contó una amiga bloguera se movieron todos los hilos políticos para tapar el asunto, incluso se acudió al camarlengo del Papa. Aunque fue un suceso muy famoso en su época como queda patente en la cancioncilla popular que reproduzco abajo, la verdad es que se intentó, y se consiguió con el concurso de la profesión periodística –siempre tan dispuesta-, a echar tierra al asunto. Pero en los años sesenta, por mor de los amigos de lo extraño y algún que otro caza ovnis (con el fraude de los ummitas por medio), volvió a la palestra esta macabra historia de una España en blanco y negro.
"En la calle de la Princesa, vive una vieja Marquesa
con su hija Margot, a quien la mano cortó.
Moraleja, moraleja, esconde la mano, que viene la vieja."
Si no conocen la historia, aquí les dejo unos vídeos de un programa de Cuarto Milenio:
Mi
amiga Gatopardo, con su acrisolada sabiduría, nos da más información y desface
algunos entuertos de esta historia:
Poco
sé de la historia familiar del que ahora denominan Josep Maria, y que entonces
era José María Bassols Iglesias, abogado, casado, con hijos, y sin
divorciar, que entonces eso no se hacía, sólo que era hijo de Agustín Bassols
Prim y de Claudina Iglesias Balat; y hermano de Claudio Bassols Iglesias, un
médico partidario de la eugenesia contra los pobres que hizo sesudos estudios
demostrando taras hereditarias en los niños de los asilos de , y de Montserrat
Bassols Iglesias, casada con Josep Figueras Navarro; y por lo tanto tío de
Josep María Figueras Bassol, que tantos y tan buenos momentos nos ha dado
como franquista, antiifranquista, españolista y catalanista.
No
estuvo casado jamás con Margarita Ruiz de Lihori, era su amante y vivía con
ella a temporadas, de la misma manera que sé que la susodicha mintió hasta en
la lápida de su tumba, pues no era marquesa de Villasante ni baronesa de
Alcahalí, porque la última poseedora del título del Marquesado de Villasante
fue CAROLINA TEIJEIRO Y HERRERA-DAVILA, Vª MARQUESA según la Real Carta de
Sucesión de 27 de Octubre de 1.930. Nacida en Madrid, (S.Ildefonso) el 6 de
Noviembre de 1.867, casada con RICARDO VILLALBA Y AVILES. Fallecida el 30 de
Mayo de 1.934, en Paseo del Prado 5, Madrid (doc nº 21) Ultima poseedora legal
de los Títulos de Condesa de Val del Aguila y Marquesa de Villasante. ). Véase:
ARBOL
GENEALOGICO DEL MARQUES DE VILLASANTE
El título de Baronesa de Alcahalí lo heredó de su padre, su hermana mayor, SOLEDAD RUIZ DE LIHORY Y RESINO, nacida en Valencia, 21 Abril de 1.887. Casada en Valencia, 13 de Noviembre de 1.926 con MANUEL DE LA VIÑA MASIP; Fallecida en Valencia el 20 de Enero de 1.962.
Margarita Ruiz de Lihori, casada con un inglés llamado Richard Shelly, no tuvo jamás derecho a título nobiliario alguno, pero se hacía llamar marquesa de Villasante y Baronesa de Alcahalí por manías de grandeza, mitomanía, y como estaba como un cencerro, como tantos con el cerebro deteriorado, cayó en veleidades ocultistas, y fue ídolo macabro de bocachanclas, y mentirosos patológicos, que la han adornado con estudios, viajes exóticos y amistades que jamás tuvo. (Fin cita)
El título de Baronesa de Alcahalí lo heredó de su padre, su hermana mayor, SOLEDAD RUIZ DE LIHORY Y RESINO, nacida en Valencia, 21 Abril de 1.887. Casada en Valencia, 13 de Noviembre de 1.926 con MANUEL DE LA VIÑA MASIP; Fallecida en Valencia el 20 de Enero de 1.962.
Margarita Ruiz de Lihori, casada con un inglés llamado Richard Shelly, no tuvo jamás derecho a título nobiliario alguno, pero se hacía llamar marquesa de Villasante y Baronesa de Alcahalí por manías de grandeza, mitomanía, y como estaba como un cencerro, como tantos con el cerebro deteriorado, cayó en veleidades ocultistas, y fue ídolo macabro de bocachanclas, y mentirosos patológicos, que la han adornado con estudios, viajes exóticos y amistades que jamás tuvo. (Fin cita)
Añadido el 9 de abril de 2016. Por cierto, siento por los lectores que la productora del programa Cuarto Milenio me "capara" los vídeos, claro que la historia que se contaba en ellos tenía más de fantasía que de realidad.
Menuda historia, vi el documental, pone la carne de gallina, y eso que el programa de Iker no es muy de mi agrado (casi nunca aclara nada).
ResponderEliminarSaludos y hasta pronto.
Tienes razón, Julia, los casos quedan casi siempre abiertos. Sobre este asunto existe un informe del CSID (centro de inteligencia)que sabemos de su existencia, pero no de su contenido. Supongo que tratará de los nazis que se refugiaron (bajo el amparo del régimen) por la zona de Albacete.
ResponderEliminarYo tengo un caso escrito, sobre una política muy importante del siglo XX, con cuyo cadáver se hicieron extraños rituales en un chalet de Madrid. Son estas historias negras que parecen fruto de la imaginación de los escritores góticos, pero son reales.
A mí me gustaría más leerla, sobre todo después de un comienzo tan espléndido, que verla en un video. Ya me has dejado intrigado, voy a ver si me entero en Internet de lo que ocurrió.
ResponderEliminarLa iba a escribir, Miguel, pero me entró tal pereza, que desistí. Con la entrada de mañana lo comprenderás. En mi descargo te diré que tengo un refriado importante, con afonía, dolor de cabeza, moqueo, en fin, todo eso que tenéis los humanos.
ResponderEliminarCuando pueda explicaré la historia de un cura que dejó los hábitos para dirigir una república democrática entre dos reinos. Espía, guerrillero y masón, fue ajusticiado en plaza pública. Desde entonces ya no tose.
Por cierto, don Miguel, gracias por decir lo del "comienzo espléndido", viniendo de un incorruptible crítico literario como usted, es todo un halago. Gracias.
ResponderEliminarUno de los "expedientes x" españoles --como se ha dado en llamarlos ahora-- más misteriosos, espeluznantes y siniestros de cuantos hemos conocido. Sus puntos de contacto con algunos aspectos poco conocidos del affaire de Ummo --Jacques Vallee lo cita en alguno de sus primeros libros-- lo hacen aún más interesante si cabe.
ResponderEliminarOscuro es el mejor adjetivo que se me ocurre para calificar esta historia.
Nuestra cordial enhorabuena por su blog.
Saludos desde http://www.viajesconmitia.com
Gracias, amigo. Le sigo en su blog.
ResponderEliminaryo vivi en el piso de la marquesa en princesa 3 años sin saberlo, ya ves que susto cuando me entere y le pregunte al portero y me dijo q era verdad jajajaja
ResponderEliminarTe recomiendo la estupenda biografía de la marquesa que ha escrito el psiquiatra albaceteño Cándido Polo.
ResponderEliminarPor cierto, sobre la presencia de nazis en el Albacete de la posguerra no hay la menor prueba. Tan sólo las menciones que hacen Manuel Carballal y otro colega argentino (creo), que no dan el menor detalle ni ofrecen más explicaciones, lo que hace dudar del dato.
Parece claro que el vínculo entre Ummo y la marquesa es un invento de los pergeñadores de Ummo, a finales de los 60 (cuando aún se trataba el caso en los tribunales y, por tanto, en la prensa), pero que no hay el menor indicio sobre la presencia de falsos ummitas ni nazis verdaderos en la "recoleta población manchega".
Y los hay, por favor, que alguien se moleste en explicarlos. Empieza a cansar que se trate tan mal este tema.
("Y si los hay", quería decir. Y no me refería a tí cuando hablo de lo mal que se trata el tema ;-)
ResponderEliminarGracias amigo por los datos, Yo creo que el caso es lo suficientemente truculento y extraño de por sí, como para que se incluyan tonterías como la de los ummitas. La participación de un miembro de la conocida familia catalana Bassols y de ciertos sectores de la iglesia para tapar el asunto es mucho más interesante que las supuestas teorías conspiranoicas. Yo conozco otro caso, con personas históricamente mucho más relevantes, que también realizaron extraños rituales parecidos a éstos (con una muerta) en un chalet muy exclusivo de una urbanización de Madrid en la década de los setenta. Es un caso histórico, documentado y conocido.
ResponderEliminarSuena interesante. ¿Has escrito algo sobre el tema?
ResponderEliminarEn cuanto al libro de Polo, hace un repaso exhaustivo a la biografía de la marquesa y traza un perfil psicológico bastante completo. Por lo que he leído en este y en otros libros (como "Toda la verdad sobre el caso de la mano cortada", de Fabián García, quien repasa con todo detalle el sumario) no creo que los hechos respondan a un ritual esotérico o religioso o de ese tipo. Más bien apunta a un desorden mental de doña Margarita, como señala Polo.
Parece que poco a poco van saliendo más datos, vaya. Sólo falta aclarar pistas más oscuras y escasamente documentadas, como el papel del hijo, los manejos para tapar el caso (que desconocía, sobre todo en lo que se refiere a la Iglesia) o el más que dudoso capítulo de los nazis (detalle que no me hace mucha gracia, por cómo algunos hacen ver que escamotean datos que quizá ni siquiera existan).
En cualquier caso, con protección o sin ella, lo cierto es que la prensa se cebó con la buena mujer, quien además acabó en la ruina. Todo un personaje, ¿verdad?
Saludos.
Sí, tengo algo escrito (inédito, de momento), pero te digo que es un caso oscuro pero conocido. En ciertos ambientes de la aristocracia madrileña se puso de moda un siniestro personaje que practicaba, entre otras cosas, rituales para, supuestamente, absorber el poder o carisma de ciertos personajes fallecidos. Y los que le seguían no eran perturbarlos mentales (por lo menos reconocidos, je, je, je), había diplomáticos, militares, empresarios y demás, entre ellos te citaré a, por ejemplo, a Isabelita Perón (la segunda esposa de Perón), que estuvo bajo la influencia de un ocultista reconocido.
ResponderEliminarNunca me metí a fondo en la historia de la mano cortada, cuando lo hago en una historia es de una forma casi obsesiva por la documentación y el dato preciso (siempre que las circunstancias y mis medios me lo permiten, claro), por lo que supongo que algunas cosas quedarían desmontadas, por lo que agradezco la información sobre esos libros. Yo siempre digo que la vida y la realidad ya es bastante extraña de por sí, como para añadirle más milongas, pero ya sabes, vivimos en la era del espectáculo.
Se me olvida. Tienes razón, se cebaron en la mujer, pero no en su esposo, Bassols, tan culpable como ella por lo que parece, fue a él al que se quiso proteger, y los contactos de la familia ayudaron a ello.
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