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miércoles, 7 de diciembre de 2016

La cruz y la corona contra la ciencia republicana


Por: Cristina Calandre Hoenigsfeld (LQSomos).

Sigue el agravio comparativo, la cruz y la corona contra el Dr. Luis Calandre Ibáñez y la memoria republicana. Residencia de Estudiantes: olvidando científicos y médicos.

Durante estos dos últimos meses se están llevando a cabo diversos homenajes a Federico García Lorca, con motivo del aniversario de los 80 años de su muerte (1-2-3-4-5), organizados por la Residencia de Estudiantes (CSIC).

Esto no nos sorprende, pues si hacemos un rápido resumen de de las Exposiciones (46) y del Catalogo general de la Residencia (161) que aparecen en la web de la Residencia, constatamos que a los poetas como Lorca, Cernuda, Juan Ramón Jiménez, Alberti, pintores como Dalí, cineastas como Buñuel, etc., son bastante frecuentes los libros y exposiciones dedicados a ellos, sin escatimar recursos públicos (6).

Sin embargo, a los grandes médicos directores de los laboratorios que se situaron en la Residencia de Estudiantes, dirigidos por los grandes científicos y médicos, como Luis Calandre Ibáñez (mi abuelo), Dr. Juan Negrín, Dr. Pío del Río Ortega, todos ellos discípulos de Ramón y Cajal (Presidente de la Junta para ampliación de Estudios) no tienen reconocimiento alguno, exceptuando los dedicados a Severo Ochoa (que en realidad fue un alumno del laboratorio de fisiología de Negrín), y su carrera científica como Nobel, al desarrollo en los EE. UU.), un pequeño librito –obra teatral, titulada “El café de Negrín”– pero del Dr. Calandre ni rastro, excepto un pequeño homenaje en 1990 al que pude asistir, donde se ocultó su gran labor durante la Guerra civil española, desde el Hospital de Carabineros, curando a milicianos enfermos de malaria, la existencia de un refugio antiaéreo y su puesto como subdelegado de la JAE.

Luis Calandre Ibáñez 

Hay que recordar que Luis Calandre Ibáñez fue el primer becario de la Residencia de Estudiantes en 1910 y que creó el primer laboratorio, el de anatomía microscópica en 1912… ¡todo un pionero!

Fue además su médico desde 1910 hasta 1936. Luego, a partir de 1937 y hasta marzo de 1939, durante la Guerra de España, fue el director del Hospital de Carabineros situado en dicha Residencia, donde hizo construir un refugio antiaéreo por la cantidad de bombas nazi fascistas que caían (que se medio destruyó por una nefasta rehabilitación en 1990-2001), y en donde se curaron a cientos de milicianos de una grave epidemia de malaria, desatada en los frentes de Madrid.

Por lo bien que cuidó de los edificios, fue nombrado subdelegado de la Junta para ampliación de Estudios (JAE) en octubre de 1938, por Tomás Navarro Tomás, su secretario.

Posteriormente, los franquistas y los del Opus Dei represaliaron a Calandre duramente con cárcel, multa y depuración (Colegio de Médicos), por haber dirigido dicho Hospital, y “salvado rápidamente a demasiados enfermos”.


Recordemos que en el año 1999, el CSIC – Opus Dei, decidió poner como presidente honorario del Patronato de la Fundación Residencia, a Felipe VI (7), siendo ministro de Educación el actual Presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ministerio que presidía el Patronato de dicha Residencia.

En ese año ya se estaba acabando la “modélica rehabilitación” de la Residencia y sus jardines… y en ese mismo año le otorgó la Generalitat de Catalunya el premio Blanquerna…, extrañas coincidencias!

La Residencia de Estudiantes fue siempre una institución que dependió de la JAE (Ministerio de Instrucción Pública), así que no comprendo cómo pasó a depender de una Fundación privada, presidida por la monarquía, la antítesis de una institución que siempre fue laica y republicana, como buena heredera de la Institución Libre de Enseñanza (ILE).
Es urgente, que vuelva a depender del Ministerio de Educación y Cultura y que sus importantes archivos, los de la JAE y del Museo Pedagógico, pasen a una archivo estatal, de acceso libre a todos los investigadores. Yo misma tuve problemas para acceder a sus fondos, y eso que era la nieta del Dr. Calandre… o quizás por eso.

Notas:


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