El más famoso de los caricaturistas europeos y el de más calidad. Este pintor y caricaturista marsellés dotó a sus obras de gran dramatismo y crudeza reforzando así su clara intención de protesta social. Comenzó su carrera artística como dibujante publicitario. Se hizo famoso con unas litografías descarnadas donde criticaba a políticos y burgueses. Durante la Revolución de 1848 trabajó la sátira política corriendo grandes riesgos.
Solía hacer unas esculturas caricaturescas en yeso y bronce que luego utilizaba como modelos. Nada escapó a la mirada crítica de Daumier; un estudio de sus obras bastaría para tener una visión muy certera sobre los acontecimientos políticos y sociales del siglo XIX en Francia.
Una caricatura que costó la cárcel
En 1834 la revista francesa La Caricature había sido clausurada y multada más de veintisiete veces. Su director Philipon y el dibujante Daumier eran carne de juzgado pero hasta entonces se habían librado de la cárcel. Hasta el fatídico día en que decidieron mezclar la fruta con la monarquía. No se les ocurrió otra cosa que representar la silueta corpulenta y tripuda de Luis Felipe I de Orleans en forma de una pera, o como un tripón a lo Gargantúa. Los caricaturistas fueron condenados a seis meses de cárcel. En 1835 un intento de atentado contra el rey provocó una censura implacable siendo prohibidas las caricaturas políticas.
© JAVIER CORIA
que porqueria
ResponderEliminar¡Vivan!, los argumentos sólidos. Por otra parte es difícil cometer dos faltas de ortografía en un texto tan pequeño de dos palabras. Las frases se comienzan con mayúscula: "Que", y "porquería" lleva tilde en la "í". Por lo demás sea bienvenido/da, aquí se aceptan las críticas, pero un poco más razonadas. Se trata de que aprendamos todos.
ResponderEliminarEste artista era un GENIO, no cabe otro calificativo
ResponderEliminarJavier, me parece muy interesante tu aporte. Soy caricaturista y sí, Daumier es considerado unos de los padres de la caricatura política.
ResponderEliminarInteresante información, estoy investigando a Daumier y el texto y las imágenes me han resultado útiles. Del incidente habla Baudelaire en su libro "Lo cómico y la caricatura".
ResponderEliminarGracias.