La Guerra Civil española y la Segunda Guerra Mundial truncaron muchas carreras literarias y artísticas, algunas nunca las conoceremos y otras nos han llegado parcialmente o con muchas lagunas. Sin ninguna duda podemos hablar de una “generación perdida” en nuestro país. Este es el caso de Benigno Bejarano.
Benigno Bejarano (1900-1944). Periodista y escritor anarquista nacido en Alburquerque (Badajoz), aunque residió en Madrid. Durante mucho tiempo, el lugar y fecha de nacimiento de este autor se desconocían; gracias al trabajo de Agustín Jaureguiza se pudo localizar la partida de nacimiento que sitúa el natalicio el 22 de noviembre de 1900, en esta ciudad extremeña. Bejarano estudió en la Sorbona y fue un colaborador del periódico la Solidaridad Obrera. En 1941 se exilió en Burdeos y en el 42 fue detenido por la GESTAPO y enviado al campo de concentración de Watenstedt, cercano al más conocido campo de Neuengamme, en las cercanías de Hamburgo, Alemania. La narrativa vanguardista, la sátira y el humor, fueron los ejes principales de la novelística de Bejarano; en el humor precisamente, se encuadra El fin de una expedición sideral: Viaje a Marte, novela publicada en el verano de 1932. Un “Rayo-exprés”, que no es otra cosa que un bólido que viaja por impulsos sucesivos que le proporcionan los rayos artificiales creados en el interior de la nave, es el método utilizado en este caso. Los marcianos de Bejarano dominan varios idiomas, entre ellos el castellano por la visita secreta de Domingo González en referencia al personaje de Francis Godwin.
Bejarano murió asesinado por los nazis en el invierno del 44 en los “Camiones Fantasmas”. Aplicaban una goma al tubo de escape y se gaseaba a los prisioneros en un traslado ficticio. Nos encontramos ante un talentoso escritor, hoy injustamente olvidado.
© JAVIER CORIA
NOTA: Las imágenes de esta entrada son gentileza de Agustín Jaureguiza: http://www.auguribe.com/
¿Dónde se puede leer sus libros, Javier?
ResponderEliminarMuy interesante Javier. No dejarás de sorprenderme nunca.
ResponderEliminarabrazos.
Álvaro, los libros de Bejarano ya sólo se encuentran en librerías anticuarias. Agradezco a Jorge Tarancón que en su día me prestara el libro sobre el viaje a Marte.
ResponderEliminarLuis, es un honor tenerte por aquí. Sorprenderte a ti es gratificante, teniendo en cuenta los reportajes que has vivido, como cuando experimentaste la gravedad cero en la NASA o entrevístate a Stephen Hawking. Abrazos y nos vemos el lunes para pergeñar una fascinante historia en la montaña mágica.
Y no podran encontrarse en alguna biblioteca? voy a buscar.
ResponderEliminarMargot
Margot, en la BN imagino que estrarán, pero la verdad es que no he buscado. Sería una información interesante si nos dices que los libros de Bejarano se pueden encontrar en otras bibliotecas.
ResponderEliminarYo pensaba que debían digitalizarse y ponerse en la web.
ResponderEliminarOye, Javier, mira quién ha vistado mi blog "MINISTERIO DE DEFENSA, Ministerio, Aragon, España".
Recuerdo que te habían visitado del Ministerio del Interior cuando lo del vino de coca.
Claro que podría ser una casualidad. También me han visitado, y varias veces, del Instituto Nacional Penitenciario del Perú.
Pues eso sería una buena idea, una web dedicada a digitalizar los libros de estos autores cuyas obras ya no se encuentran. El "Garn Hermano" nos vigila...
ResponderEliminarHice parte de mi trabajo i he encontrado algunos libros de Benigno en la biblioteca de letras i la del Pavelló de la República de la Universidad de Barcelona. Peró no es ninguno de los que tu mencionas, os paso los titulos por si os interesan.
ResponderEliminarConspiradores : novela
Bejarano, Benigno
Barcelona : Juvenanl, cop. 1933
Enviado especial : Novela
Bejarano, Benigno
Barcelona : Edic. del Autor, 1938 (Edit. Solidaridad Obrera)
España frente al fascismo internacional : acta procesal de la intervención extranjera en España
Bejarano, Benigno
Barcelona : Ediciones del Comité Regional de la C.N.T. en Cataluña. Sección Propaganda y Prensa, [1938]
Turistas en España : novela epigramática
Bejarano, Benigno
Barcelona : U.D.E., 1932
Habra que seguir buscando peró de momento és lo que he encontrado.
besitos
Margot
¡Gracias!, gran trabajo. "Enviado especial" si que la conocía. También tiene una novela titulada "Fantasmas", Relato (Cop.1932)Bejarano, Benigno
ResponderEliminarBarcelona : Agora, Cop. 1932 (Barcelona : Graf. Alfa. Una idea para editores actuales, quizá sería bueno una reedicón y recuperación de este autor.
"La voz de los náufragos: narrativa republicana entre 1936 y 1939" es un libro de varios autores publicado por Ediciones de la Torre, para estudiosos de estos autores olvidados.
Saludos
Ha llegado a mis manos un interesante artículo sobre Bejarano. Firmado por Julia María Labrador y publicado en la revista "Arbor" (creo que del CSIC). Por el nos enteramos de datos hasta hoy desconocidos sobre este autor. Que, por cierto, parece que no murió el invierno del 44, sino en verano de 1946. Gracias a la autora por citarme en el apartado de "Estudios Literarios" de la Bibliografía.
ResponderEliminar"Exiliado en Francia desde 1939, en 1941 conocerá en Burdeos a Abel Paz, quien recuerda, de nuevo en sus memorias, que Bejarano vivía con su mujer4 en un hotel cercano al bar o
“bistrot” Chez Pierre de la pequeña calle Moliner, en el que se hospedaban también Antonio Casanova y el pintor y escultor
Eleuterio Blasco Ferrer5. La Gestapo lo detiene en 1942 y lo encarcela en el castillo de HA de Bordieux. En 1943 será trasladado a Compiegne y, posteriormente, en octubre de ese mismo año, confinado en el campo de concentración
de Neuengamme, del que pasará a Watenstedt, un campo comando del anterior en el que fue asignado al grupo constructor de barracones de ladrillo y cemento. Empedernido fumador, su salud estaba muy quebrantada por la rudeza de
tales trabajos, tanto que empezó a escupir sangre; durante un tiempo Enrique Comas, con la ayuda de un doctor polaco,lo retuvo en la enfermería donde se encargó de pintar
puertas e interiores, hasta que los nazis se dieron cuenta de su precario estado y decidieron llevárselo a “trabajos menos
pesados”, eufemismo que encubría ser destinado a la cámara de gas y los hornos crematorios. Murió gaseado por los nazis en un camión fantasma en el verano de 1946."